Mes: diciembre 2015

Este año 2015 deja tras de si un montón de vivencias y de experiencias. Muchas cosas han pasado, algunas sumamente dulces y otras dolorosas aunque todas y cada una me han dado más entendimiento y aprendizaje. En este año murió mi perro Coco con casi 13 años y aunque llegó a mi vida hace solo 6, fueron suficientes para dejar en mi una inmensa huella de amor, conexión y ternura. Duele cuando sabes que ha llegado su momento y que la muerte, el último paso de la vida, le reclama.

Puede que algunas personas no hayáis tenido la vivencia de querer a un animal, pero si estoy segura que muchos de vosotros habréis dejado ir algo que queríais y, la verdad es que duele, porque el corazón no distingue de especies ni razas. Es un aprendizaje dejar ir lo que uno quiere y, cuando nada puede hacerse, solo queda respirar profundo y destensar, sentir y confiar en que el cuerpo sabe como lidiar con eso.

También este año me deja tres cursos más en los que aprendido y disfrutado a partes iguales. He cambiado de espacio de trabajo. He publicado dos vídeos, uno sobre la experiencia de Julià y otro en el que explico cómo es una sesión del Método Grinberg. Entre otros, he estado haciendo un proceso de recuperación para Aida y creo que en Enero ya estará disponible el vídeo en el que podréis ver el antes, durante y después. Puedes ver todos mis videos aquí.

Pero… ¿sabéis qué? si pudiese elegir puede que no cambiara nada porque puede que algunas cosas tengan su momento y su lugar. Me quedo con todo, lo bonito y lo feo, lo dulce y lo amargo y empiezo el año 2016 con ganas y nuevos proyectos personales, de trabajo y de formación.

Voy a ofrecer talleres sobre atención corporal y otras temáticas que estoy preparando, el primero sobre respiración, será en Enero y podrás ver toda la info aquí. Y hacia mitad de 2016, probablemente también podré ofrecer clases de Movimiento, según el Método Grinberg. Esto me hace especial ilusión porque, antes de probarlas, nunca había hecho una actividad que combinara ejercicio, libertad, expresión y que me divirtiese tanto. Será la primera vez que alguien ofrezca estas clases en Sabadell y me gusta ser yo quien pueda ofrecértelas. Puedes ver videos sobre Stopping Novement Training aquí.

Y ya para terminar os dejo aquí un ejercicio creado por Avi Grinberg llamado Reset. Es como una meditación en atención corporal, que podéis hacer en unos 10 minutos y que puede servir para hacer un click y empezar de nuevo si estáis nerviosos, dispersos, enfadados, tensos o simplemente para sentirte más tú. Personalmente, me gusta mucho y me resulta eficaz porque no soy persona de sentarme y dejar la mente en blanco. Así que me sirve más mantener el enfoque en una sola cosa y el resultado final es que tengo la cabeza más vacía y estoy más satisfecha. Me gustaría mucho que me contáseis vuestra experiencia si lo practicáis.

Pues ahora ya, solo me queda desearos un estupendo 2016 lleno de vida.

¡¡¡Bienvenido 2016, estoy preparada para comerte a bocados!!!

Ayer estuvimos grabando la experiencia de Aida y los cambios en su vientre. Son momentos dulces y amargos a la vez cuando te despides de un cliente, con la satisfacción de haber conseguido el propósito del proceso y con la pena al despedirte, deseándole lo mejor sabiendo que algo ha terminado. Mientras grabábamos las imagenes finales para el vídeo que pronto os presentaré, comentábamos lo emocionante que resulta para mi servir las intenciones y deseos del cuerpo, que no siempre encajan con lo que la mente dice. Yo, a veces, tengo la sensación de que hay toda una vida sucediendo en el cuerpo del cliente y yo entro por un tiempo en ese universo. Es una sensación muy especial sentirme parte de esa otra vida sucediendo junto a mi. Y es que un cuerpo sano siempre busca vivir en la mayor de sus capacidades.

Pues lo que os contaba, que próximamente podré presentaros un nuevo video donde se podrán ver imágenes antes de empezar a recibir sesiones, a mitad del proceso y al final. Para mi, su proceso fundamentalmente la ha enseñado a gestionar el dolor físico y emocional conectado a la cicatriz, consiguiendo digerir una situación traumática para ella y ganando una gran fuerza y determinación que la ha hecho, entre otras cosas, que haya dado espacio propio a su proyecto profesional.

Aquí lo cuenta Aida como ha sido su proceso:

«En un any he vist molts canvis, no només físics, sino també a nivell emocional, creatiu..

Aquest treball ha estat molt intens, vaig començar amb una ferida amb més de 7 anys, vermellosa, ampla, que picava, que em molestava i acabo amb una cicatriu del color de la carn, més estreta i amb cap síntoma de picor o escuor.

He aprés a no engantxar-me en la ràbia, a ser valenta i enfrontar-me al, acollint i sentint. He aprés a posar-hi més atenció al cos, a la cicatriu i a mi mateixa, he aprés a desbloquejar (encara en procés).

El canvi físic és molt visible i l’emocional també, coses que estaven en l’aire, “obertes” he aconseguit tancar-las, he decidit anar a materialitzar quelcom i ho he fet, he tancat el que estaba obert, atrevint-me, sense por.

Ha estat un treball molt intens, dur de vegades, dolorós, d’altres, però sobretot sanador.»